Hablar de estereotipos, «los topicos«, es la oportunidad de ponerse una muy incómoda «camisa de once varas» (nueve metros), expresión que también podría significar asaltar un muro de 9 metros … es decir meterse en un lío, buscar problemas.

Andalucía es la segunda región más grande de España y la más poblada. Si bien es cierto que los andaluces son notablemente diferentes en muchos aspectos de los castellanos, vascos, gallegos o catalanes, la mayoría de los estereotipos que los afectan son generalmente intercambiables con los que describen al español, hasta el punto de preguntarse si la visión internacional del español no está limitada a describir al pueblo andaluz y la paella.
La vida cotidiana, los medios de comunicación e incluso las intervenciones políticas usan y abusan de estos estereotipos. Por eso, no es inútil conocerlos y reconocerlos. Los estereotipos más negativos molestan y enojan … pero hay que decir que los andaluces también se ríen de sí mismos, no se lo toman en serio, excepto para reivindicar su pueblo natal, la mejor receta de tortilla y el resultado de un clásico Barça-Madrid.
En su mayor parte, los viajeros románticos han fantaseado y descrito una Andalucía exótica y pintoresca, sensual, llena de toreros, gitanas, y bandidos. No están solos, ya que los españoles que viven al norte de Despeñaperros generalmente comparten una visión de una sociedad andaluza algo indolente, muy entusiasta de sus fiestas religiosas, pero también de las profanas; donde la pobreza agudiza el ingenio y los trapicheos; y donde se extiende la celebre noción de “chapuza española». Pero sobre todo, los andaluces y las andaluzas son vistos como personas alegres, divertidas, próximas y cariñosas.
Estos son los principales estereotipos que caracterizarían a los andaluces. ¿Crees que se hace necesario recordar que los clichés no dicen absolutamente nada sobre una persona en particular?

El ‘arte’ (ser divertido)


El desempleo
El Flamenco
La semana santa
Los chistes
El señorito andaluz
Los toros

La Feria y los vestidos de gitana


La siesta

Uno de los aspectos más sorprendentes es que los propios habitantes de Andalucía han generado sus propios clichés… que resultan, como siempre, exagerados, un tanto estupidos y divertidos, en definitiva una fascinante recolección sociológica y una fuente imprescindible para disfrutar del arte de conversar y de la cordialidad mediterránea.